Hay muchas maneras de llegar a terapia, así como hay muchas razones para ir al dentista. Lo que está claro es que uno acaba mirándose el alma igual que los dientes: porque le duele.
Ese fue también mi caso. Me dolía y no entendía dónde estaba mi malestar. Así que tras la muerte de mi padre me dio por bailar.
Me podría haber apuntado a algo pautado pero estaba harta de pautas. Quería llegar a las profundidades del pozo y bucear. Quizá así me enterara de algo de mi propia vida. Empecé con Movimiento Expresivo y Centros de Energía, seguí con Terapia Corporal Integrativa (TCI), risoterapia, Coaching Lúdico, Movimiento libre, Movimiento Auténtico…lo importante era llegar a mi alma a través de mi cuerpo. Dejar que mi cuerpo dolorido pudiese expresar las emociones en vez de evitarlas o acallarlas.
Y el descubrimiento fue que cuando se abre el grifo y sale todo el dolor, el miedo, la rabia, la tristeza…siempre brota de nuevo la alegría. Hay un placer en dejar que lo que nos duele se exprese, en poder llorar nuestros duelos y en gritar nuestro enfado sin filtro. Hay un placer en poder decir que estoy triste o que tengo miedo si eso es lo que me pasa. Y hay un placer en reírme por nada, por el simple hecho de estar viva. Hay un placer en vivir lo que uno de verdad quiere o necesita vivir. El placer desconoce los “debería”.
Eso fue lo que me pasó a mí y posteriormente a much@s otr@s que se han apuntado a este viaje. Fue tan revelador que decidí probar la fórmula en otr@s y resulta que funciona y además es placentera, lúdica, juguetona, amorosa, humana y transformadora.
Este es el tercer año que facilito grupos de crecimiento personal para adult@s que desean ser de una vez quienes de verdad son. Expresar el potencial de inteligencia, afectividad y energía (acción) que poseen. Crear tu propia vida. Puedes apuntarte en Palma o en Manacor y empezar ya a guiarte por esta brújula.
Hay un gozo en expresar por fin quienes somos. Hay un gozo en vivir centrados. “La brújula es el placer” es un proceso para que ahondes en tu esencia mediante el juego, el movimiento, el trabajo corporal, la bioenergética, el silencio, las constelaciones familiares…descubrirás tu máscara y el personaje que has adoptado en la vida y emprenderás el camino de la libertad, que no es otro que el del contento.
En el camino del placer está la libertad, está el no juicio, está el amor incondicional y tu verdad más profunda.
La brújula es el placer. Sin duda.
PALMA Y MANACOR.
«Mi experiencia con la Brújula es el Placer »
Estoy en este taller desde sus inicios. Casi no me he perdido ninguna sesión. Solamente cuando mi hija me ha necesitado. Algún avión he tomado para poder asistir…….. y no me entusiasman los aviones.
En el Espai TCI he reencontrado a personas conocidas de otras épocas pasadas.Como Mar Millán.
Personas inteligentes,capacitadas,sensibles, que me trasmitían alguna forma de bloqueo en aquellos momentos.
La primera señal de haber hecho diana con el taller fue notar como estas personas han cambiado.Se han transformado como si fueran otras.Más libres,relajadas,confiadas y felices.En plenitud.
Después con el trabajo corporal, en las sesiones , pude notar rápidamente los efectos beneficiosos directos y una transformación interior.
Hay un sentido lúdico en las sesiones. Suelen ser divertidas, liberadoras y en mi producen revelaciones.
Pero no todo es placer.A menudo salgo tocado al remover las emociones,traumas,miedos.La relación con el padre y la madre,la vergüenza,la culpa……, el como atiendo mis necesidades.
Desde la risoterapia,el movimiento instintivo y el auténtico,el silencio ,la voz,el desbloqueo de anillos energéticos corporales. Todo son herramientas de exploración hacia el autoconocimiento. Me proporcionan una mayor consciencia de los síntomas corporales de mis emociones.
En mi caso, después de cada sesión al acostarme relajado. De madrugada me despierto con algún sueño-revelación que me aporta mucha luz a mis conflictos. Cada trabajo en grupo me ayuda a liberar alguna capa de memoria olvidada,de cosas no expresadas, daños escondidos y grabados en el cuerpo.
Los » efectos secundarios» de la Brújula se hacen notar. En una mayor conciencia corporal de lo que me gusta y lo que no.Es así como aprendo a decir «No» más rápidamente. No me es necesario estar en estado de alerta.El cuerpo ya me lo dice.
Al poder decir » No» desde la calma y la serenidad aprendo a poner el límite amoroso. Las relaciones fluyen mejor.Camino más ligero por la vida.Voy abandonando el juicio propio, los pensamientos negativos. Gestiono y supero miedos,fobias,limites mentales….
Puedo disfrutar de la sensualidad, la atracción del momento sin quedar tan atrapado en ello como anteriormente.
Saber mejor «quien soy». Es como tener un juego de atajos para acceder a ser yo mismo.
Evito dispersarme en el juicio y conceptos ajenos , de lo correcto,útil,deseable,productivo, conveniente……….
A mi, «La Brújula es el Placer» me viene a confirmar una idea que intuía hace algún tiempo:
» Los mismos caminos que me llevan al malestar,la enfermedad ……recorridos a la inversa ( desde lo corporal a la emoción y de ahí al pensamiento) Me conducen a la sanación»
Mi capacidad de enfermar es la misma que de sanar. Igual de profunda. Yo elijo.!!!
Todo esto no sería posible sin la facilidad de Mar Millán de crear un entorno de confianza,no juicio,introspección y comunión con el grupo en el Espai TCI.
Escucho los conflictos de los demás .Expreso los míos .Me dejo llevar por la música.Navego en mi interior,conecto con personas del grupo.Desde la libertad de participar o no en los ejercicios y la certeza del «no juicio». A través de la invitación al juego…..
«Quien se moja, se refresca» afirma Mar .
Definitivamente , es cuando experimento placer…que se que voy por mi buen camino.Confio en mi placer como la mejor de las Brújulas.La confianza abre caminos y nuevas relaciones.
Gracias Oscar y Ada por crear Espai TCI. Gracias Mar Millán por conducir !!! Gracias Brujuleros por compartir !!!
Francesc Ferreri 2019.