A veces me preguntan en qué me he formado y empiezo a enumerar una retahíla de formaciones que he integrado en los últimos 10 años.
La respuesta más sincera y la que más le ayuda al cliente (lo sepa él/ella o no) es: me he formado en vivir. Vivo cada día de mi vida. E intento hacerlo -cuando sé, cuándo puedo – con conciencia. Y todos estos días me nutren y me traen experiencia y aprendizajes para acompañarte.
Es el lugar más humano y diáfano desde el que acompañar respetuosamente tus pasos.
Mi currículum es amplio y le estoy enormemente agradecida. Amo aprender y siento una curiosidad innata y juguetona. Más «formaciones» vendrán.
Y sin embargo, reconozco que la vida y las experiencias vividas a pie de calle: en la familia, en la pareja, en el trabajo, en las amistades, en mi propia soledad…son mi bagaje más preciado y compartible.
Gracias, Vida. Así te tomo, así me doy: con lo vivido.
